Cámara baja de EEUU aprueba proyecto de ley Curas del Siglo XXI

Por Toni Clarke (Reuters) - La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el miércoles un proyecto de ley de 6.300 millones de dólares que sus partidarios dicen que incentivará la innovación médica, acelerará el desarrollo de nuevos medicamentos y ampliará el acceso a tratamientos de salud mental. La Ley Curas del Siglo XXI recibió un extendido respaldo bipartidista, incluido el del gobierno del presidente Barack Obama, aunque sus críticos han dicho que entrega enormes recursos a la industria farmacéutica y realiza recortes a los programas de salud públicos y al seguro médico Medicare para las personas mayores. Luego de dos años de negociación, la ley contiene 19 puntos centrales, incluidas medidas para avanzar en la medicina personalizada, reducir los tiempos de aprobación de medicamentos y fomentar la investigación del Alzheimer y el cáncer. La Cámara baja aprobó el proyecto por 392 votos a favor y 26 en contra. Se espera que el Senado lo vote la próxima semana. La Casa Blanca dijo en un comunicado luego de la votación de la Cámara de Representantes: "El Senado debería aprobar rápidamente este proyecto para que el presidente pueda firmarlo". El proyecto de ley, patrocinado por el representante republicano Fred Upton, autoriza 4.800 millones de dólares para los Institutos Nacionales de Salud y 500 millones para que la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) modernice el proceso de pruebas clínicas y contrate nuevo personal. También contempla 1.000 millones de dólares durante dos años para combatir el abuso de opiáceos y heroína y 1.800 millones de dólares para respaldar a la iniciativa Cancer Moonshot del vicepresidente Joe Biden, diseñada para acelerar la investigación de nuevas terapias para tratar la enfermedad. Los críticos del proyecto, incluidos los senadores demócratas Elizabeth Warren y Jeff Merkley y el representante demócrata James McDermott, han dicho que los fondos finalmente no tendrían la disponibilidad esperada debido a que deben ser asignados en diferentes leyes de financiamiento. En tanto, los cambios a la autoridad de la FDA se convertirán en ley. Esas modificaciones, sostienen sus críticos, rebajarán los criterios para la aprobación de medicinas y pondrán en riesgo la seguridad de los pacientes.