La elección de Biden-Trump ha sido una montaña rusa para los apostadores

Detrás de su micrófono en Las Vegas el martes, Gill Alexander mantuvo la discusión durante Prime Time Action, su programa de apuestas deportivas, centrado en los deportes.

Sin embargo, durante las pausas comerciales, Alexander rastreó la carrera presidencial entre Donald Trump y Joe Biden, y fue durante una pausa, cuando cerraron las urnas en la Costa Este, cuando el voto de Trump en Florida creció y las probabilidades de las apuestas cambiaron a favor del titular republicano con impresionante velocidad, hasta Alexander le preguntó a su coanfitrión si lo que estaba viendo en el mercado de apuestas era real.

“Hubo una gran desconexión entre lo que me gusta llamar las probabilidades de apuestas de las elecciones generales previas y las apuestas en vivo irracionales que estaban sucediendo”, dijo Alexander. “No creo que volvamos a ver algo así, donde lo que vemos en el mercado de las apuestas no es en absoluto un reflejo de la verdad”.

Desde mayo, las casas de apuestas con sede en el extranjero o en Europa, donde es legal apostar en las elecciones, a diferencia de Estados Unidos, habían instalado a Biden como el favorito para ganar. La ventaja continuó hasta el martes, donde las probabilidades le dieron a Biden una probabilidad implícita del 64% de desbancar a Trump, según Pete Watt, gerente de relaciones públicas de Oddschecker con sede en Londres, que compara las probabilidades de múltiples casas de apuestas deportivas.

Florida no era esencial para el camino de Biden hacia la victoria, sabía Alexander. También creyó durante mucho tiempo que los mercados de apuestas eran más precisos que las encuestas. Pero a medida que el estado se puso rojo (republicano), los apostadores quizá asustados por la sorprendente victoria de Trump en 2016 invirtieron dinero en el titular, lo que desafió sus expectativas.

“Si lo que pasó en 2016 no hubiera sucedido, no se habría visto nada de este comportamiento”, dijo Alexander, un anfitrión de múltiples programas con Vegas Stats and Information Network. “Pero debido a que se avecinaba una especie de nube del 2016, para otros la alegría de ese año, donde Trump desafió todas las encuestas, pienso que la gente, tan pronto como Florida cambió, creó en su memoria la idea de que esto es 2016 de nuevo, y se fueron por la ciudad apostando. Cuando, por supuesto, no era el caso en absoluto y fue demasiado prematuro. No mostraron paciencia alguna”.

Después de la medianoche en la Costa Este, la probabilidad implícita de ganar de Biden cayó hasta un 22.2%, dijo Watt. Por la mañana, el mercado se había estabilizado, y los apostadores veían a Biden con tres veces más posibilidades de ganar que a Trump, ya que los resultados en Arizona, Wisconsin y Michigan apuntaban hacia el demócrata, pero la noche de actividad parecida a una montaña rusa no se había olvidado.

“Obviamente, esto fue un informe adelantado, es muy normal, entendemos el ‘espejismo rojo’ y la ‘ola azul’, las cosas suceden temprano”, manifestó Watt. “Pero el mercado respondió muy rápidamente. Tuvimos muchos apostadores potencialmente presa del pánico que buscaban reducir sus pasivos y eso es lo que resultó en este gran cambio en las probabilidades”.

Un día después del cierre de las urnas, la contienda aún no se había decidido, pero a pesar de todo, surgió al menos un claro ganador: las casas de apuestas que albergaron la frenética actividad. Para el miércoles por la tarde, Betfair, una casa de apuestas europea había obtenido más de $606 millones de las apuestas electorales, según la compañía. Eso duplicó con creces el dinero total apostado en el sitio durante las elecciones estadounidenses de 2016, que anteriormente habían tenido la distinción como el evento individual más grande de Betfair, según Action Network.

La elección actual también generó más dinero que los eventos combinados del Super Bowl, el Derby de Kentucky, Las Finales de la NBA de este año y la pelea de 2017 entre Conor McGregor y Floyd Mayweather, según Watt.

PredictIt, un llamado “mercado de valores de la política” con sede en Nueva Zelanda en el que se pueden comprar y vender acciones de candidatos con dinero real, también vio una cantidad sin precedentes de acciones negociadas el martes y miércoles, expuso Brandi Travis, portavoz de la compañía. Ella dijo que las convocatorias de los colegios electorales estado por estado del mercado de predicciones estaban en camino de ser 100% precisas.

Las 10 apuestas más grandes realizadas en Betfair el martes por la mañana respaldaron a Biden como ganador, según Action Network, que citó datos de la casa de apuestas. Eso también continuó la tendencia notada por Watt en las elecciones presidenciales de 2016.

“Se están colocando muchas más apuestas por Trump, pero las apuestas que se hicieron con [Hillary] Clinton, y esta vez con Biden, esas apuestas son bastante más grandes en promedio y sugieren que los jugadores más serios ven a Biden como una opción realista”, —señaló Watt. “Mientras que estamos viendo que los apostadores casuales ponen de $5 o $10, en moneda equivalente, por Trump”.

“Creo que eso se debe a que Trump es tan increíblemente atractivo que ha atraído a las apuestas a gente que tal vez solo apostaría normalmente en los deportes”.

Alexander comparó lo que vio como un cambio reaccionario de dinero detrás de Trump con alguien que apuesta en vivo a un partido de fútbol mientras ve pequeños fragmentos de la transmisión del juego fuera de orden, sin tratar de reconstruir el contexto general.

Los aficionados casuales acostumbrados a apostar en los deportes podrían haberse tropezado con las diferencias en las apuestas políticas, dijo Watt. Lo distinto con los juegos es que ofrecen a los apostadores líneas de dinero y múltiples apuestas complementarias, una elección proporciona un camino más binario para ganar y perder.

Aún así, incluso cuando Biden comenzó a avanzar lentamente hacia una victoria del Colegio Electoral el miércoles por la mañana, los apostadores continuaron apostando más por Trump, expuso Watt.

Los apostadores no lo habían abandonado porque sus probabilidades cada vez más altas ofrecían un mayor valor y debido a su historial de superar las posibilidades.

“Es un agitador que ha llevado a las elecciones a la gente que quizá nunca haya apostado en ellas”, dijo Watt.

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Este artículo fue publicado por primera vez en Los Angeles Times.