La hidratación guiada por la velocidad del flujo de orina es mejor para prevenir la lesión renal aguda

Por Will Boggs

(Reuters Health) - La hidratación guiada por la velocidad del flujo de orina (VFO) con el sistema RenalGuard es mejor que la hidratación guiada por la presión de fin de diástole del ventrículo izquierdo (PFDVI) para prevenir la lesión renal aguda por contraste (LRA-PC), de acuerdo con el estudio REMEDIAL III.

"La hidratación es de máxima importancia para prevenir la LRA-PC", dijo el doctor Carlo Briguori, del Cardiocentro Mediterránea, Nápoles, Italia. "Estoy convencido de que los 'esquemas de hidratación personalizados' serán la práctica de referencia para prevenir la LRA-PC".

El régimen de hidratación para prevenir la LRA-PC es una infusión de solución salina (1 mL/kg/h, reducida a la mitad en los pacientes con una fracción de eyección del ventrículo izquierdo del 35% o menos o clase funcional NYHA >II) de 12 horas antes hasta 24 horas después de la exposición a los medios de contraste.

La hidratación guiada por la VFO y la PFDVI son regímenes personalizados para mejorar la eficacia y reducir el riesgo de desarrollar edema pulmonar agudo, en especial en los pacientes de alto riesgo.

El equipo de Briguori investigó si la hidratación guiada por la VFO con el Sistema RenalGuard de PLC Medical Systems es superior a la hidratación guiada por PFDVI en el ensayo clínico aleatorizado sin ciego de fase III sobre pacientes con alto riesgo de desarrollar LRA-PC.

El resultado primario, LRA-PC combinado con edema pulmonar agudo, se registró en 20 de los 351 (5,7%) pacientes en los que se utilizó la VFO y 36 de los 351 (10,3%) en los que se aplicó la PFDVI, lo que se traduce en una disminución significativa del 44%, según publica el equipo en JACC: Cardiovascular Interventions.

El número necesario a tratar para prevenir una complicación con la hidratación por VFO era 22. El riesgo de padecer LRA-PC era un 43% menor con la VFO (5,7%) que con la PFDVI (10%), mientras que el riesgo de padecer edema pulmonar agudo era un 93% más bajo con la VFO (0,3%) que con la PFDVI (2%), aunque esta última diferencia no fue estadísticamente significativa.

La tasa de insuficiencia renal con necesidad de diálisis en el hospital era similar en ambos grupos, como el tiempo de internación.

"Espero que los médicos presten más y más atención al riesgo de desarrollar LRA-PC. Sólo con la detección de los pacientes de riesgo podremos reducir esta complicación", dijo Briguori.

FUENTE: JACC: Cardiovascular Interventions, online 14 de septiembre del 2020