Llegan las lentillas ‘milagro’ que hacen desaparecer la miopía

Corrigen la visión lateral y reducen entre 3 y 5 dioptrías

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Son las primeras lentillas del mundo que previenen la degeneración de la retina. (Foto: Getty Images)

La miopía es el principal defecto de visión del mundo. De hecho, el 80 % de la población con estudios superiores la padece y, aunque se pueden utilizar en la edad adulta, estas nuevas lentes son especialmente beneficiosas para los niños.

Su gran ventaja es que controlan la progresión de la miopía en una edad en la que el avance de esta patología es “feroz”, según cuenta Jaume Pauné, de la Universidad Politécnica de Catalunya (UPC) que, en colaboración con un grupo de científicos de la Facultad de Óptica y Optometría de Terrassa (FOOT), acaba de presentar el nuevo producto.

"La miopía empieza entre los 9 y los 13 años de edad, progresa fuertemente hasta los 16 y se ralentiza sola a partir de entonces. Pero el hecho de frenar un 43 por ciento su progresión permite poder tener un cambio al final de este proceso de entre tres y cinco dioptrías menos”, explica Pauné.

Otra de las aportaciones más importantes de las nuevas lentillas es que hacen al ojo más estable. La convencionales corrigen solamente la visión central del ojo y no los laterales, lo que provoca el crecimiento del ojo y de la miopía, mientras que la lente de Pauné evita este aumento al cubrir también la visión lateral.

“Esta reducción de la miopía disminuye el riesgo de sufrir una patología ocular muy grave, cosa que significa que evitamos los problemas a los niños cuando llegan a la edad adulta, previniendo situaciones que pueden derivar en la pérdida de visión”, añade Pauné.

En este sentido, el especialista señala que a partir de las cinco dioptrías el riesgo de sufrir una patología ocular se incrementa entre 20 y 50 veces en comparación con una persona sin problemas visuales, y también apunta que la miopía es la causante de una quinta parte de la ceguera en todo el mundo.

Su inventor asegura que "no existe ninguna otra lente de contacto progresiva comercializada en el mundo con esta efectividad” pero advierte de que su eficacia también depende del número de horas de uso y de la genética de cada uno.

Normalmente se recomienda usar lentillas a partir de los 12 o incluso 16 años y no muchas horas, pero “estas lentillas se pueden usar a los ocho o 10 años (siempre que el niño sea responsable) y cuantas más horas mejor. Es cierto que se aumenta el riesgo de conjuntivitis pero el tiempo es fundamental para corregir la miopía”, concluye el experto.

Se usan como las lentillas convencionales, cuestan unos 400 euros al año y se renuevan cada 3 meses.