¿No te gustan las verduras? Prueba estos pasteles

Dejadme que os diga una cosa: no perdéis peso porque no queréis. Tened en cuenta que la comida entra por los ojos… pues bien, procurad que aquellos pecaditos llenos de azúcar hasta los topes que os comeriais a todas horas tengan el peor aspecto posible. Os damos alguna idea: cookies desparramadas, tartas mutantes, bizcochos en plan escombro… Y ahora, vamos al otro lado, el de las verduras. ¿Por qué no presentarlas como si fueran pasteles de esos que nos ponen los ojos en blanco? Pues bien, esa es la idea que han tenido en Japón (como siempre). Atención a los pasteles de ensalada que se ha inventado una nipona.

En el Vegedeco Salad Cafe, de Nagoya, Mitsuki Moriyasu se ha propuesta crear ensaladas con “nuevas formas” con el objetivo de combinar “salud y belleza”. Y para ello les ha dado la forma de apetitosos pasteles capaces de engañar a nuestros sentidos.

En lugar de merengue, fondat o crema pastelera, en los pasteles de Moriyasu nos encontramos con remolacha, tomates o pepinos. Además, al cortar muchos de ellos nos topamos con más vegetales en el interior como zanahoria rallada o cebolla.

La crema con la que se amalgaman los ingredientes puede estar hecha de tofu o de queso y, sobre los brillantes colores, Moriyasu declara que provienen “de la madre naturaleza”. Es decir, que no hay aditivos de ningún tipo. Los pasteles son, además, bajos en hidratos de carbono y no tienen gluten.

Pero, ¿cómo logra esta chef nipona crear tartas tan impresionantes? ¿Qué fórmula utiliza? En su web pone descripciones de ejemplos que llaman la atención. Por ejemplo, la Vegedeco Salad Royal Yellow, incluye champiñones cocinados, junto con una ensalada de huevo, remolacha y pure de patatas. Otro ejemplo es la Pink Pearl, con una mousse de cebolletas y mozzarella y un toque de aceite de oliva. La Lotus Pink, por su parte, una de las más espectaculares, incluye cuatro clases distintas de vegetales frescos en un pastel esponjoso hecho a base de harina de soja, completado con una crema de tofu, remolacha y daikon, una especie de nabo japonés. Desde luego, nunca las verduras habían entrado tanto por los ojos como hasta ahora…